Las fresas tienen un color rojo fabuloso, una textura jugosa y un sabor dulce único. Están disponibles en los supermercados durante todo el año, aunque su temporada real y por lo tanto, los meses en las que las vas a encontrar «más frescas» en España es entre los meses de febrero y mayo.

Estas bayas están asociadas a muchos beneficios para la salud:

Bajas en calorías (32 cal / 100 g)

Las fresas se componen de 91% de agua y 7,7% de carbohidratos. La mayoría de los hidratos de carbono están en forma de azúcares simples, como la glucosa, fructosa y sacarosa. El contenido neto de carbohidratos digeribles es de menos de 6 gramos por cada 100 gramos de fresas.

Alto contenido en fibra

Alrededor del 26% del contenido de carbohidratos de la fresa es en forma de fibra. 150 g de fresas proporciona 3 gramos de fibra, tanto soluble como insoluble. La fibra soluble se disuelve en agua para formar un gel en el intestino grueso. Este gel ayuda a manejar el colesterol en la sangre y a la absorción  de glucosa. La fibra insoluble no se disuelve en agua y por lo tanto pasa a través del sistema digestivo, manteniendo el intestino sano y previniendo el estreñimiento.

Alto contenido en flavonoides

Las fresas contienen flavonoides fitoquímicos llamados antocianinas y ácido elágico: son responsables de los colores brillantes de las frutas. Por lo general se concentran en las pieles de las frutsa, pero las bayas tienden a tener estos fitoquímicos en su interior también. Existe mucha investigación se está actualmente en torno a los alimentos ricos en antocianinas. 1

La vitamina C (y otras vitaminas y minerales).

Las bayas frescas son una excelente fuente de vitamina C, que contribuye a la protección de las células del estrés oxidativo. 100 g de fresas proporciona 58,8 mg de vitamina C (alrededor del 98% de la IDR). La vitamina C contribuye a la función normal del sistema inmune y a la reducción del cansancio y la fatiga. Las fresas también contienen manganeso, ácido fólico (B9) y potasio.

Puede ayudar a regular el azúcar en la sangre

El índice glucémico ofrece información sobre cómo los alimentos afectan al nivel de azúcar en sangre y la insulina. Cuanto menor sea la puntuación, más lenta la absorción de azúcar, lo que ayuda a mantener los niveles normales de azúcar en la sangre. Las fresas tienen una puntuación de índice glucémico relativamente bajo de 40 (ten en cuenta que el arroz blanco es de 89 y el arroz integral es 50). Con el aumento de la diabetes tipo 2, una enfermedad donde la reducción de la producción de la hormona insulina desequilibra los niveles de azúcar en la sangre, hay una gran cantidad de investigación en torno a los alimentos que podrían ayudar a regular los niveles de azúcar en la sangre.

Para sacar el máximo provecho de los maravillosos nutrientes que proporciona esta fruta, cómela cruda y fresca. Sin embargo, pueden ser utilizadas en mermeladas, jaleas, postres y para dar sabor a yogures y helados.

Además de todo eso, las fresas son muy fáciles de cultivar. Pueden ser cultivadas en casi cualquier lugar: en macetas, contenedores o cestas colgantes. ¿Por qué no pruebas a cultivarlas tu mismo?

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Referencia:

Skemiene et al (2013) Anthocyanins block ischemia-induced apoptosis in the perfused heart and support mitochondrial respiration potentially by reducing cytosolic cytochrome c. The International Journal of Biochemistry & Cell Biology 45 (1): 23–29