Medita

La meditación es una práctica antigua donde se despeja la mente y el cuerpo se relaja. Muchos estudios han demostrado que crea una mente más tranquila y contribuye a la felicidad. Sólo 5 minutos al día marca una enorme diferencia. Incluso desde la primera sesión de meditación, la ira disminuye1. Inicia y termina el día con 5 minutos de meditación y aumenta el tiempo gradualmente si lo deseas. Asegúrate de que estás en un lugar tranquilo y en un ambiente donde no hay distracciones. Siéntate cómodamente con la espalda recta. Empieza por centrarte en tu respiración. Trata de vaciar tu mente como sea posible. Al principio esto será un reto, pero la práctica crea al maestro.

Sal a la calle y haz ejercicio

La vida al aire libre nos da más que aire fresco. La exposición al sol hace que tu cuerpo sintetice la vitamina D. Se asocian niveles bajos de vitamina D con estados de ánimo tristes2, así que tener niveles sanos es esencial. Puedes pedir un análisis de vitamina D y llamar a uno de nuestros nutricionistas para consultar los resultados.

No sólo es el ejercicio bueno para el cuerpo, sino que también es bueno para la mente. Aumenta las hormonas de la felicidad. El ejercicio se recomienda sobre todo para las personas con depresión. Comienza tratando de llegar a 10.000 pasos por día, y cuando lo estés alcanzando considera alguna otra forma de ejercicio, como una clase. Esto nos trae al siguiente punto.

Participa en actividades sociales

Sal y conoce a gente. Socializa con amigos. Ve a los lugares donde hay gente. Ser social no sólo aumenta tus oportunidades en la vida, sino que también amplía tus horizontes. El que más variedad tiene en la vida, más feliz será. Las clases son excelentes maneras de conocer a gente. Estáis allí porque tenéis un interés común. ¿Por qué no probar una clase de danza o yoga?

Muestra bondad

Mostrar bondad a los demás no sólo aumenta la felicidad y calidez de quien lo recibe sino también de quien lo da. La bondad podría ser ayudar a alguien a hacer algo, enviar flores cuando están enfermos, o incluso preparar té en el trabajo. Los actos espontáneos de bondad también son una buena manera de hacer más amigos. Involucrarse en eventos de caridad es una muy buena manera de hacer el bien.

Esto por lo general nos introducea una comunidad con una causa común, nos permite socializar con otras personas y nos abre a nuevas experiencias.

Come una dieta sana y equilibrada

Esto es muy importante para la felicidad. Tenemos que mantener los niveles de azúcar en sangre estables con el fin de mantener un estado de ánimo equilibrado. También dependemos de nutrientes como L-triptófano para ser capaces de generar hormonas de la felicidad. Las grasas saludables son una parte esencial de una buena dieta. El cerebro está compuesto principalmente de grasa y necesitamos grasa para estar sanos. Omega 3 (DHA de pescado) es necesaria para mantener la función del cerebro. Las vitaminas B son también esenciales para la salud del cerebro. B1, B3, B6, B9 y B12 contribuyen a la función psicológica normal. Las vitaminas B se encuentran en vegetales de hojas verdes, cereales integrales y huevos.

Referencias:

Consciousness and cognition, February 2016, A single session of meditation reduces of physiological indices of anger in both experienced and novice meditators, Fennell AB et al.

Vitamin D Deficiency Is Associated With Low Mood and Worse Cognitive Performance in Older Adults, The American Journal of Geriatric Psychiatry,2003, Volume 14, Issue 12, Pages 1032-1040, Consuelo H et al