Las intolerancias alimentarias y alergias son comunes pero antes de buscar la manera de gestionarlas es importante conocer la diferencia entre ellas.
La intolerancia a los alimentos es la sensibilidad a un alimento específico o un compuesto de un grupo de alimentos. Hay muchas razones por las que alguien puede tener una intolerancia a los alimentos. Por ejemplo, podría ser debido a la falta de enzimas para descomponer los alimentos o debido a que el sistema inmunológico ha desarrollado una respuesta negativa a la comida para que vea el alimento como un enemigo en lugar de un amigo. Una intolerancia a los alimentos en términos del sistema inmunológico se clasifica como una respuesta de IgG. IgG es un anticuerpo que nuestro sistema inmune hace para atacar antígenos como bacterias y virus. Las intolerancias alimentarias pueden desaparecer con el tiempo con cambios en la dieta.
Las alergias son diferentes y se clasifican como una respuesta de IgE (IgE es otro anticuerpo). En el caso de los alimentos, si se come algo a lo que se tiene alergia, como un cacahuete, el sistema inmunológico comenzará a producir anticuerpos para el cacahuete. Este es el mismo proceso que ocurre cuando se detecta un virus. La diferencia está en que los alimentos como los cacahuetes no deben ser percibido como un peligro para nosotros, mientras que un virus si. Estos anticuerpos se fijan entonces a los mastocitos (que se encuentran en los tejidos del cuerpo) que están dispuestos a liberar histamina para la próxima vez que la persona come cacahuetes. La histamina y otros compuestos son los que causan síntomas como hinchazón y picazón. Si tienes una alergia a ciertos alimentos debes evitar el ingrediente alergénico. Hay alergias con síntomas muy graves y en muchos casos requiere atención médica inmediata, como antihistamínicos y una inyección de adrenalina EpiPen.
Si tienes una intolerancia, aquí hay algunos consejos para apoyar una respuesta inmune saludable y reducir la sensibilidad a los alérgenos:
- Come alimentos ecológicos siempre que sea posible para evitar pesticidas, herbicidas y aditivos.
- Ten una dieta alta en bayas y otros antioxidantes y vitamina C – como granadas, ciruelas y cerezas. El flavonoide quercetina se cree que es un buen antihistamínico natural. Algunas de las fuentes más ricas son las cebollas, manzanas (especialmente la piel), cerezas, fresas, piña y col.
- Reduce o elimina los alérgenos comunes como los lácteos o gluten para ver si tus síntomas se reducen. Sin embargo, es recomendable trabajar con un médico para asegurarse de que no estás excluyendo nutrientes esenciales.
- Si tu intolerancia es una consecuencia de enzimas digestivas bajas la suplementación puede ser una buena idea para ver si hay una mejora.
- Un suplemento de bacterias en vivo que puede ayudar a apoyar la salud del tracto digestivo y el sistema inmunológico.
- Si tu intolerancia se debe a una respuesta inmunitaria defectuosa es posible que desees probar la suplementación con beta-glucanos que se encuentran comúnmente en los hongos y levaduras. Los estudios muestran que estos pueden estimular nuestro sistema inmunológico a funcionar de manera correcta en lugar de actuar contra sustancias inocuas.
¿Tienes alguna pregunta?
Si deseas obtener información sobre como hacer frente a las alergias e intolerancias con la ayuda de un buen suplemento nutricional, ponte en contacto con nosotros para que te contemos más.
Somos el laboratorio con el que puedes hablar:
Contamos con un equipo de Nutricionistas en nuestra línea de asesoramiento, abierta para ti, para soporte y asesoramiento de productos (5 días a la semana). 912969352 o nutricion@bioventura.es
¿No tienes cuenta en BioCare®?
Puedes registrarte ahora para recibir noticias actualizadas, información de productos y ofertas exclusivas, ya seas consumidor, profesional o minorista.
Deja una respuesta